viernes, 20 de noviembre de 2015

Características arquitectónicas[editar]

Su construcción es en piedra, en forma de casa aislada, y puede alcanzar los 15 metros de altura. Suele disponer de una planta baja en la que se instalaban graneros, establos y demás dependencias agrícolas, y de una o más plantas elevadas que servían de vivienda.
El tamaño de su planta suele ser considerable, pues en ellos solían convivir todos los miembros de una familia, junto con el ganado y los pastos recolectados, que se situaban en dependencias integradas en la misma construcción.
Típicamente, el tejado es longitudinal y a dos aguas, techado con tejas. Las plantas bajas están construidas de sillería o aparejo, mientras que las plantas altas -donde típicamente se sitúan los habitáculos- pueden ser de sillería, aparejo o algún material más ligero (entramados de madera, ladrillo,...). Suele contar con una entrada en arco que da paso a un pórtico abierto. Desde él se tiene acceso a la zona de vivienda, típicamente situada en la planta de arriba, y a las demás dependencias de la casa (graneros, establos, etc).

Relevancia económica[editar]

Los caseríos eran el elemento fundamental del agro en el País Vasco y Navarra. Su concepción es la de una unidad económica esencialmente autosuficiente: tradicionalmente, el caserío estaba rodeado de los terrenos agrícolas que suplían prácticamente todas las necesidades de la familia, proveyendo de alimentos, ropas, etc, a sus moradores. Integrados en la propia construcción o en edificios anejos, se podían instalar talleres de manufactura para tejidos, labrado de piedra, herrerías,... Como unidad autosuficiente, el caserío suele presentarse de forma aislada, rodeado de campos de cultivo. Cuando aparecen agrupados, suele ser en pequeño número, usualmente en algún cruce de caminos o junto a una ermita o iglesia. A diferencia de en el resto de España, los templos religiosos, en caso de haber alguno anejo al caserío, solían ser propiedad del dueño del caserío y no de la Iglesia. El párroco solía ostentar en esos casos su parroquia en régimen de beneficio, de manera similar a como ocurría en la Inglaterra anglicana.

Relevancia social[editar]

Caserío en Rigoitia (Vizcaya).
Las rígidas leyes de mayorazgo que existían en el País Vasco y Navarra hacían que el caserío y todas sus tierras fueran heredados exclusivamente por un único individuo, típicamente el primogénito de la familia. Sin embargo, el derecho foral permitía la libre disposición de los bienes (no existía el derecho de "legítima"), por lo que la herencia podía transmitirse a algún otro vástago o familiar, incluyendo a mujeres. Esto, empero, era algo excepcional, siendo habitualmente el primogénito varón el que heredaba la propiedad.
Esto hacía que el resto de hijos varones de la familia se vieran forzados a emigrar o, en algunos casos, a trabajar para el hermano mayor, en cuyo caso no solían contraer matrimonio. El derecho de hidalguía universal imperante en VizcayaGuipúzcoa, zonas de Álava y en Navarra facilitaba el acceso de los hermanos desheredados al clero, al ejército o a la administración real. Asimismo, ello explica la gran cantidad de emigración de dichas regiones a las colonias españolas en América.
Pese a que la propiedad recaía sobre el varón, la administración del caserío solía correr a cargo de las mujeres de la familia, en un régimen que algunos han querido ver como una especie de matriarcado. Las mujeres llevaban a cabo el planeamiento de las cosechas, el ganado, etc, y en general administraban la propiedad. La importancia de la mujer dentro del núcleo familiar era, en todo caso, grande. Ello ha dado pie a la teoría de la sociedad vasca como matriarcalista, es decir, portadora de una suerte de estructura psicosocial matriarcal, pese a tender más bien hacia el patriarcado en sus estructuras sociales reales. El estatus de la mujer en la cultura vasca es quizá el más alto de Europa.
Por otro lado, al quedar el caserío adscrito a una familia determinada, tradicionalmente ésta recibía por apellido un topónimo asociado a su caserío. Así, alguien apellidado Garaikoetxea (lit. "Casa del alto") sería alguien descendiente de una familia de un caserío que hubiera recibido ese nombre, Garaikoetxea; el caserío estaría probablemente situado en un promontorio o algún lugar elevado. Igualmente, alguien apellidado Etxebarria (lit. "Casa nueva") provendría de un caserío de nueva planta, y alguien apellidado Ibarrola (lit. "Ferrería de la ribera") provendría de un caserío que albergara o se situara junto a alguna ferrería a la orilla de un río.

Historia[editar]

Padre con sus hijos trabajando en el caserío. Fografía: Indalecio Ojanguren.
La actual conformación del caserío data de hace unos 500 años. Esta conformación sintetiza en un único edifico todas las funciones esenciales, la vivienda, el granero, el pajar y el lagar. Normalmente se distribuyen en dos o tres plantas que ocupan hasta mil metros cuadrados. Este tipo de edificación sustituyó a antiguas casas rurales que eran sencillas cabañas de madera que se apoyaban en fondos de roca y se techaban con techos vegetales con tabiques de varas de castaño o avellano entretejidas al tresbolillo, recubiertas con argamasa de cal y arena.
Se cree que el actual ordenación social del caserío, donde se da una unidad de vida y trabajo desarrollada en torno a una familia tras generacional (abuelos, padres, hijos y miembros solteros desligados) surge sobre el siglo II con la primera gran crisis del Imperio Romano y que puede derivar de la cultura castrense de la Edad del Hierro.
La etimología de la palabra "baserri" señala a la misma como proveniente de "baso", que significa "bosque" y "herri" que significa "comunidad" o "pueblo", dando apoyo a la hipótesis de su significado más amplio como comunidad que como unidad habitacional.
Hacía el año 1.000 las casas que componían las aldeas se van alejado unas de otras, al principio unos 200 o 300 metros, y extendiéndose por las laderas y valles. El ordenamiento del territorio que realizaron los Señores y la iglesia llevó en algunos casos a crear y poblar ubicaciones no del todo favorables, pero necesarias para una mayor explotación del medio natural basado en el sel.
En el siglo XIV se abre un periodo de inseguridad que hace que los habitantes de los caseríos busquen la protección de las villas, escapando de los abusos de los Señores propietarios de las tierras.
Tras las guerras de bandos y el establecimiento del mayorazgo (que permite conservar toda la explotación) se produce una renovación del tipo de edificación, pasando de las pobres cabañas a los edificios más robustos y ricos, similares a los de la actualidad. El mayor esplendor se producía a mediados del siglo XVI donde ya está perfectamente conformada la edificación con sus variantes.
Estos nuevos edificios se construyen basándose en la tecnología de armar en roble de los maestros suabos del sur de Alemania, de tal formar que la estructura de madera es autoportante no recayendo sobre los muros la responsabilidad de matener el edificio en píe. Los muros, realizados a la luz de los de las catedrales góticas del sur de Francia, son también de una factura de mucha calidad.




Arte románico

El románico fue un estilo artístico predominante en Europa durante los siglos XIXII y parte del XIII.1
El arte románico fue el primer gran estilo claramente cristiano y europeo que agrupó a las diferentes opciones que se habían utilizado en la temprana Edad Media (romana, prerrománica, bizantina, germánica y árabe) y consiguió formular un lenguaje específico y coherente aplicado a todas las manifestaciones artísticas. No fue producto de una sola nacionalidad o región, sino que surgió de manera paulatina y casi simultánea en España,FranciaItaliaAlemania y en cada uno de esos países surgió con características propias, aunque con suficiente unidad como para ser considerado el primer estilo internacional, con un ámbito europeo.
Surge como consecuencia de la prosperidad material y de la renovación espiritual que inspiró la construcción de gran número de iglesias y de edificios religiosos. Las primeras construcciones se hicieron en Lombardía,Borgoña y Normandía. Desde allí se difundió por toda Europa, debido a:
  • Expansión de las órdenes religiosas (Cluny y Císter) que construyen monasterios. estos son fuente de riqueza y centro cultural y urbano de la sociedad.
  • Las peregrinaciones (en España el románico se introduce a través del Camino de Santiago).
  • Aumento de la influencia de la iglesia.
Debido a las relaciones entre religiosos y nobles, los reyes, nobles, obispos y abades de los monasterios impulsaron la construcción de las grandes iglesias y a veces eran aldeanos quienes las costeaban y construían. Las obras las realizaban artesanos especializados como arquitectos, picapedreros, pintores, etc. El arte románico fue sobre todo un arte religioso, que reflejaba los valores de la nueva sociedad feudal, que a la vez era guerrera y cristiana.

Desarrollo[editar]

Desde el siglo VIII, una serie de acontecimientos históricos posibilitaron la renovación y expansión de la cultura europea: la subida al trono de Francia de los Capetos, la consolidación y difusión del cristianismo, el inicio de la Reconquista en la península ibérica y, fundamentalmente, el cimiento de las lenguas románicas, son los hitos que marcaron este resurgimiento.
Alrededor del año 1000, una expansión generalizada en los ámbitos económico y cultural propició un importante crecimiento demográfico en las sociedades occidentales, roturándose nuevas tierras y abriéndose antiguas rutas de comercio, que posibilitaran los caminos de peregrinación. Toda Europa se vio invadida por una auténtica fiebre constructiva; se había conseguido formular un arte capaz de representar a toda la cristiandad: el románico.
El término "románico", como concepto que define un estilo artístico, lo utilizó Charles de Gerville por primera vez en 1820 considerando con este término todo el arte que se realiza anterior al estilo gótico desde la caída del Imperio romano; y por analogía al término ya conocido de lenguas románicas, el arte románico sucedía al arte antiguo tal y como las lenguas románicas eran las sucesoras del latín.
Posteriormente, la acepción de arte románico se fue restringiendo y pasó a designar el arte desarrollado en Occidente entre los siglos XI y XII, aunque todavía hoy siguen las controversias para determinar con exactitud la amplitud de espacio y tiempo que abarca este estilo.
En la definición de este primer arte europeo, es fundamental la reforma monacal que realizó la orden cluniacense como resultado de una revisión en profundidad de las comunidades benedictinas. El monasterio de Cluny, fundado en el año 930, se convierte en el gran centro difusor de la reforma, alcanzando rápidamente una gran expansión y consiguiendo, a través de sus monasterios, que el arte románico se difundiera por todo el mundo cristiano europeo. Antes de que la orden de Cluny capitalizara y extendiera, el románico ya se había desarrollado en Italia, en la región de Como: el llamado románico lombardo o primer románico, concepto debatido, debido a Puig i Cadafalch, que se aplica a su extensión a los reinos hispano-cristianos, especialmente al románico catalán y elrománico aragonés, con menor incidencia en el románico castellano-leonés.





Arte gótico

Bóveda gótica. San Juan (Świętej Janów), Toruń.
Representación gótica de la Adoración de los Magos en laCatedral de Estrasburgo.
Arte gótico es una denominación del estilo artístico que se desarrolló en Europa occidental durante los últimos siglos de la Edad Media, desde mediados del siglo XII hasta la implantación del Renacimiento (siglo XV para Italia), y bien entrado el siglo XVI en los lugares donde el Gótico pervivió más tiempo. Se trata de un amplio período artístico, que surge en el norte de Francia y se expande por todo Occidente. Según los países y las regiones se desarrolla en momentos cronológicos diversos, ofreciendo en su amplio desarrollo diferenciaciones profundas: más puro en Francia (siendo bien distinto el de París y el de Provenza), más horizontal y cercano a la tradición clásica en Italia (aunque al norte se acoge uno de los ejemplos más paradigmáticos, como la catedral de Milán), con peculiaridades locales en Flandes, Alemania, Inglaterra y España.

Contexto histórico[editar]

El arte gótico propiamente dicho coincide en el tiempo con la plenitud y la crisis de la Edad Media. Se suele indicar que frente al arte románico (que refleja una sociedad ruralizada de guerreros y campesinos), el gótico coincide con el máximo desarrollo de la cultura urbana donde aparece la burguesía, las universidades y el florecimiento de las órdenes religiosas (monásticas como el Cister y mendicantes como franciscanos y dominicos), así como la acentuación de los conflictos y la disidencia (revueltas populares, herejías, desarrollo y crisis de la escolásticaCisma de Occidente) y finalmente los pavorosos espectáculos de la Peste Negra y la Guerra de los Cien Años en un mundo tan cambiante que sólo puede entenderse en términos de una mutación fundamental (para la historiografía materialista, la transición del feudalismo al capitalismo).

Caracterización[editar]

Frente a las pequeñas y oscuras iglesias rurales del románico, el gótico eleva prodigiosas catedrales llenas de luz, desarrolla una importante arquitectura civil e independiza a las otras artes plásticas (pintura y escultura) de su subordinación al soporte arquitectónico .
No obstante, hay también muchos elementos de continuidad: el predominio de la inspiración religiosa en el arte sigue siendo indiscutido, el monasterio como institución apenas varía excepto en detalles formales y de adaptación a nuevos requerimientos, la misma planta de las iglesias sigue siendo predominantemente la cruz latina con cabecera en ábside orientada al este, aunque se complique o varíe (plantas basilicales, colocación del transepto en el centro, complicación de navescapillas y girolas). Sin duda el principal elemento de continuidad es la concepción intemporal de la obra: en la mayor parte de las construcciones los estilos se suceden y funden al ritmo de los siglos, sabiendo los contemporáneos que hacen una obra que ellos no verán terminada, ni quizá sus hijos o nietos. En muchas de ellas, incluso se pone en valor el atrevimiento por comenzar un desafío técnico o económico (a veces por rivalidad política) que cuando se inicia no se ha planificado cómo terminar, como es el caso de las catedrales de Siena y de Florencia.
Planta de la catedral de Chartres.
Portada gótica de Santa María la Real en Sasamón, con el característicoarco apuntado y la abundante escultura en las arquivoltas y el tímpano.

Arquitectura[editar]

A nivel arquitectónico, el estilo gótico nació en torno a 1140 en Francia, siendo considerada como el primer monumento de este movimiento la basílica de la abadía real de Saint Denis(edificada por el abad Suger, consejero de Luis VII de Francia).
También desde finales del siglo XII y comienzos del XIII se divulga por los monasterios de la orden del Císter un estilo despojado de ornamentación y reducido a la pureza de los elementos estructurales, expresión de las concepciones estéticas y espirituales de Bernardo de Claraval, que se suele denominar arte cisterciense.
Este arte se ha definido durante mucho tiempo de manera bastante superficial exclusivamente por la utilización de uno de sus elementos, el arco apuntado, al que suele llamarse ojival, del que se deriva la bóveda de crucería que permite desplazar los empujes a contrafuertes externos, que se alejan aún más de los muros mediante el uso de arbotantes. Eso permitió la construcción de edificios mucho más amplios y elevados, y el predominio de los vanos sobre los muros. Los elementos sustentantes (pilares de complicado diseño) quedan mucho más estilizados. Pero la utilización de un elemento no puede definir un estilo de forma global, se trata de un problema más amplio, de una nueva etapa histórica, una nueva concepción del arte y con él del mundo. Un elemento estructural, por importante que sea, no puede resumir un concepto global sobre la vida.
Vitrales góticos, coro superior de la Basílica de Saint-Denis.

La luz[editar]

Los nuevos edificios religiosos se caracterizan por la definición de un espacio que quiere acercar a los fieles, de una manera vivencial y casi palpable, los valores religiosos y simbólicos de la época. El humanismo incipiente liberaba al hombre de las oscuras tinieblas y le invitaba a la luz. Este hecho está relacionado con la divulgación de las corrientes filosóficas neoplatónicas, que establecen una vinculación entre el concepto de Dios y el ámbito de la luz. Como las nuevas técnicas constructivas hicieron virtualmente innecesarios los muros en beneficio de los vanos, el interior de las iglesias se llenó de luz, y la luz conformará el nuevo espacio gótico. Será una luz física, no figurada en pinturas y mosaicos; luz general y difusa, no concentrada en puntos y dirigida como si de focos se tratase; a la vez que es una luz transfigurada y coloreada mediante el juego de las vidrieras y los rosetones, que trasforma el espacio en irreal y simbólico. El color alcanzará una importancia crucial.
La luz está entendida como la sublimación de la divinidad. La simbología domina a los artistas de la época, la escuela de Chartres considera la luz el elemento más noble de los fenómenos naturales, el elemento menos material, la aproximación más cercana a la forma pura.
El arquitecto gótico organiza una estructura que le permite, mediante la utilización de la técnica, emplear la luz, luz transfigurada, que desmaterializa los elementos del edificio, consiguiendo claras sensaciones de elevación e ingravidez.1

Escultura gótica[editar]

Retablo, típica talla en madera del siglo XV, conservado en la Catedral de AmiensFrancia.
Virgen del Patrocinio, Parroquia de Sant Miguel deCardonaEspaña.
En la escultura gótica las tallas en piedra continúan usándose para la decoración de la arquitectura, además de cumplir la función evangelizadora (el catecismo de los analfabetos, la inmensa mayoría de la población) pero cada vez se emancipa más (paso del relieve al bulto redondo). La escultura gótica evolucionó desde un estilo alargado y rígido, aún en parte románico, hacia un sentimiento espacial y naturalista a finales del siglo XII y principios del siglo XIII. La influencia de las esculturas griegas y romanas que aún se conservaban se incorporaron al tratamiento de las telas, las expresiones faciales y la pose.
Las esculturas góticas nacieron en los muros de las iglesias, a mediados del siglo XII en la Isla de Francia, cuando el abad Suger hizo construir la abadía de Saint-Denis (h. 1140), considerada el primer edificio gótico, y muy pronto le siguió la catedral de Chartres (h. 1145). Anteriormente, no había tradición escultórica en la Isla de Francia, así que los escultores se traían de Borgoña, quienes crearon las revolucionarias figuras que actuaban como columnas en el Pórtico Real de Chartres. Era un invento enteramente nuevo y proporcionaría el modelo para una generación de escultores.
Las ideas francesas se divulgaron. En España la penetración del gótico francés se hizo a través de maestros y obras que llegaron procedentes de este país, por ejemplo en Cataluña la influencia del taller de Rieux es bastante evidente en la virgen del Patrocinio de Cardona. En Alemania, desde 1225 en la catedral de Bamberg en adelante, el impacto se encuentra en todos los lugares. La catedral de Bamberg tiene el más amplio conjunto de escultura del siglo XIII, culminando en 1240 con el Caballero de Bamberg, la primera estatua ecuestre en el arte occidental desde el siglo VI, y que se cree que retrataba a Conrado II.
En Inglaterra la escultura estaba más limitada a monumentos funerarios y decoraciones no figurativas, en parte debido a la iconoclastia cisterciense. En Italia aún persistía la influencia clásica, destacando obras como el púlpito del baptisterio de Pisa (1269) y el de la catedral de Siena. Una obra maestra tardía de la escultura gótica italiana es la serie de tumbas de los Scaligeri en Verona.
Las técnicas de tallado de madera se hacen cada vez más sofisticadas, llegando a su máximo esplendor en la integración del color y el diseño arquitectónico de complejísimos retablos. La recuperación de la tradición clásica de la fundición del bronce deberá esperar al renacimiento italiano.
El escultor flamenco-borgoñón Claus Sluter y el gusto por el naturalismo marcó el comienzo del fin para la escultura gótica, evolucionando hacia el clasicista estilo renacentista a finales del siglo XV.
Simone Martini (1285–1344). Temas oscuros y una intensa emoción se vieron cada vez más acentuadas en el arte gótico tardío.

Pintura gótica[editar]

Hasta alrededor de 1200 no apareció un estilo de pintura que pueda llamarse «gótico»; es decir casi 50 años después del comienzo de la arquitectura y la escultura góticas. La transición del románico al gótico es muy imprecisa y no hay un claro corte, pero podemos ver los comienzos de un estilo que es más sombrío, oscuro y emotivo que en el periodo previo. Esta transición ocurre primero en Inglaterra y Francia alrededor de 1200, en Alemania en torno a 1220 e Italia alrededor de 1300.
Es usual indicar que, mientras en el románico las representaciones figurativas son simplificadas e idealizadas, en el gótico se tiende a aumentar el realismo y naturalismo, aproximándose a la imitación a la naturaleza que será el ideal del renacimiento, incluyendo la representación de paisajes, que, no obstante, sigue siendo poco usual.
Virgen con ángeles y San Francisco.AsísCimabue, hacia 1280
En el gótico, en correspondencia con las nuevas tendencias filosóficas y religiosas (recuperación de la filosofía de Aristóteles a través del averroísmohumanismo de San Francisco de Asís) se tendió a aproximar la representación de los personajes religiosos (los santos, los ángeles, la Virgen MaríaCristo) en un plano más humano que divino, dejándoles demostrar emociones (placer, dolor, ternura, enojo), rompiendo el hieratismo y formalismo románico.
También hay lentos avances en el uso de la perspectiva y de otras cuestiones técnicas en pintura en cuanto al tratamiento de los soportes (que permiten la mayor difusión de un arte mobiliar), los pigmentos y los aglutinantes.
La pintura, esto es, la representación de imágenes sobre una superficie, durante el periodo gótico, se practicaba en cuatro técnicas principales:
  • Frescos. La pintura mural o frescos siguieron usándose como el principal medio para la narración pictórica en las paredes de las iglesias en el Sur de Europa, como una continuación de las tradiciones cristiana yrománica anteriores.
  • Vidrieras. En el norte de Europa, las vidrieras fueron el arte preferido hasta el siglo XV.
  • Pintura sobre tabla. Comenzaron en Italia en el siglo XIII y se extendieron por toda Europa, de manera que para el siglo XV se había convertido en la forma predominante, suplantando incluso a las vidrieras.
  • Miniaturas. Los manuscritos iluminados representaron la más completa documentación de la pintura gótica, documentando la existencia de una serie de estilos en lugares donde no han sobrevivido otras obras monumentales.
La pintura al óleo sobre lienzo no se hizo popular hasta los siglos XV y XVI y fue el punto de partida del arte renacentista.

Artes decorativas y suntuarias[editar]

Miniatura de Bernardo de Claraval ("B" de una letra capitular en un manuscrito del siglo XIII).
Las artes decorativas o artes suntuarias del periodo gótico tuvieron un amplio desarrollo.

La consideración social del arte y el artista[editar]

El florecimiento del negocio de la lana y los paños, vinculados a las ferias y rutas comerciales que recorren Europa de norte a Sur (de FlorenciaGénova y Venecia a Champaña y Flandes, sin olvidar Medina del Campo), producen el nacimiento de un arte singular: el tejido de tapices, que tuvo un prestigio social importantísimo. No para sus autores, que nunca pasaron de la consideración de meros artesanos, sino para sus poseedores. No habiendo una clara separación entre las artes industriales y las que hoy consideramos bellas artes, podría decirse lo mismo de maestros de obras, pintores y escultores, que aunque conservemos el nombre de muchos de ellos, no pasaban de ejercer también uno de los oficios viles y mecánicos, ni siquiera equiparables a las profesiones liberales

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