CIUDADES EN LA EDAD MEDIA
CIUDADES EN LA EDAD MEDIA Muy interesantennn 2015-1
Es preciso ser muy cuidadoso de tener los dientes limpios, pues blanquearlos con polvos es propio de jovencitos. Frotarlos con sal y alúmina es muy perjudicial y servirse de la orina para este propósito es cosa de españoles“.
hIGIENE EN LA EDAD MEDIA
OFICIOS EDAD MEDIA
ENFERMEDADES
Ninguna enfermedad deforma tanto al ser humano como la lepra. La Biblia ya la mencionaba, y según estimaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS), hoy todavía padecen esta enfermedad unos 15 millones de personas en el Sudeste asiático (especialmente India), África, Centroamérica y Sudamérica. Anualmente hay alrededor de 400.000 nuevas infecciones causadas por la Mycobocterium leprae. Tras una fase asintomática de cuatro a diez años (período de incubación), produce mutilación y caquexia crónica. Para que el bacilo de la lepra se contagie, es necesario un contado constante y estrecho. La lepra es la enfermedad de los pobres, de la miseria. Los niños están especialmente expuestos.
La muerte social
En
la Edad Media no sólo los médicos diagnosticaban la lepra, también lo
hacían los sacerdotes. La diagnosis se realizaba tras efectuar una
sangría, inspeccionar la sangre y la orina y observar todo el cuerpo. Si
se creía que se trataba de lepra, el enfermo era conducido a la iglesia
en una procesión. Se le acostaba ante el altar, se entonaban cantos
funerarios y se le vestía con el llamado traje de Lázaro. Los vivos
colores de esta vestimenta hacían que el enfermo fuera visible desde
bien lejos. Además, tenía que llevar guantes y una castañuela con la que
avisar de su presencia. Su matrimonio se consideraba disuelto y sus
propiedades pasaban a manos de parientes o de la Iglesia.
La enfermedad tiene curación
En
1873, Gerhard Armauer Hansen (1841-1912) consiguió identificar el
agente patógeno en Bergen, Noruega. Le ocurrió como a muchos
descubridores y al principio sus conocimientos no se tomaron en serio.
Pero, finalmente, se comenzó a aislar a los enfermos para impedir así
una mayor propagación. Hoy en día, si la enfermedad se diagnostica a
tiempo, es posible detener su avance con una terapia combinada a base de
antibióticos. El peligro de contagio es relativamente bajo, pero a
causa de las mutilaciones, sigue siendo difícil reintegrar en la
sociedad a los que se curan.
VIVIENDA EDAD MEDIAVIVIENDAS
No hay comentarios:
Publicar un comentario